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Antonin Dvorak, Stabat Mater. Antonin Dvorak(1841-1904), maestro checo nacido en Nelahozeves. A finales de la década de 1850 estudió en la Escuela de Órgano de Praga. Tocó la viola en la Orquesta del …Más
Antonin Dvorak, Stabat Mater.

Antonin Dvorak(1841-1904), maestro checo nacido en Nelahozeves. A finales de la década de 1850 estudió en la Escuela de Órgano de Praga. Tocó la viola en la Orquesta del Teatro Provisional de Bohemia que dirigió Smetana a partir de 1866. Entre 1892 y 1895 fue director del Conservatorio Nacional de Nueva York. Cuando se le propuso el puesto Dvorák puso la condición de aceptar la posición a condición de que los alumnos que no tuviesen recursos fuesen admitidos gratis. Se aceptó y dio lugar a una etapa muy fructífera para el maestro. En Estados Unidos estrenó su "Sinfonía nº 9" y el "Concierto para violonchelo". Fue un maestro fundamental de finales de la época romántica que recibió influencias de Brahms, Wagner y la música popular de su tierra natal. Entre otras aficiones, Dvorák era un apasionado de las locomotoras y le encantaba dar de comer a las palomas en los parques.
Del maestro Dvorak te traigo su Stabat Mater. Fue compuesto entre 1876 y 1877 como reacción a la muerte de si hija Josefa. Es la primera obra de Dvorak de contenido religioso. Está dividida en 10 partes, estando emparentadas entre sí la primera y a última. La obra es extensa y también intensa ya que el maestro usa de una gran cantidad de medios para poner música a ese texto tan bello de la época medieval. Se trata de una obra importante del maestro que hoy te propongo para que la disfrutes.
La interpretación es del Arnold Schoenberg Choir y la Chamber Orchestra of Europe dirigidos por Nikolaus Harnoncourt.
La obra consta de diez secciones:
Cuarteto, Coro. Andante con moto (Stabat Mater dolorosa)
Cuarteto. Andante sostenuto (Quis est homo, qui non fleret)
Coro. Andante con moto (Eja, Mater, fons amoris)
Bajo solo, Coro. Largo (Fac, ut ardeat cor meum)
Coro. Andante con moto, quasi allegretto (Tui nati vulnerati)
Tenor solo, Coro. Andante con moto (Fac me vere tecum flere)
Coro. Largo (Virgo virginum praeclara)
Dúo. Larghetto (Fac, ut portem Christi mortem)
Alto solo. Andante maestoso (Inflammatus et accensus)
Cuarteto, Coro. Andante con moto (Quando corpus morietur)
El primer movimiento es una sonata de forma prolongada en el estilo sinfónico. La obra abre con una larga introducción orquestal, en si menor. Dvořák tuvo en cuenta que en la música barroca, si menor fue considerada como la tonalidad del sufrimiento pasivo. El tema de la introducción orquestal lo repite el coro. Un segundo tema que contrasta con el anterior es introducido por los solistas y el coro. Una sección de desarrollo conduce a la reexposición del material de apertura.
El órgano tiene un papel independiente que acompaña al semi-coro femenino en el cuarto movimiento, y no se utiliza de otra manera.
Del mismo modo, el corno inglés tiene una línea solista en la apertura del segundo movimiento y por lo demás estará ausente. Aunque no se especifica en la partitura, que puede ser tocado por uno de los dos oboístas, ya que no tocarán en esta sección.
El movimiento final recuerda los temas de apertura de la obra, pero luego se convierte en la clave más importante para un triunfal Amén en forma de fuga de considerable complejidad, que culmina con un fortissimo.
La cantata está escrita para una orquesta de: 2 flautas, 2 oboes, corno inglés, 2 clarinetes en la, 2 fagotes, 4 trompas (dos en fa, dos en re), 2 trompetas, 3 trombones, tuba, timbales, órgano y sección de cuerdas.
Los solos están escritos para soprano, tenor, alto, bajo, acompañados por coro.
La versión para piano de 1876 prescribe idéntico tratamiento vocal.
La duración aproximada de la obra es de 90 minutos.

1.Versión por Lope de Vega
La Madre piadosa estaba
junto a la cruz y lloraba
mientras el Hijo pendía.
Cuya alma, triste y llorosa,
traspasada y dolorosa,
fiero cuchillo tenía.
2.
¡Oh, cuán triste y cuán aflicta
se vio la Madre bendita,
de tantos tormentos llena!
Cuando triste contemplaba
y dolorosa miraba
del Hijo amado la pena.
3.
Y ¿cuál hombre no llorara,
si a la Madre contemplara
de Cristo, en tanto dolor?
Y ¿quién no se entristeciera,
Madre piadosa, si os viera
sujeta a tanto rigor?
4.
Por los pecados del mundo,
vio a Jesús en tan profundo
tormento la dulce Madre.
Vio morir al Hijo amado,
que rindió desamparado
el espíritu a su Padre.
5.
¡Oh dulce fuente de amor!,
hazme sentir tu dolor
para que llore contigo.
Y que, por mi Cristo amado,
mi corazón abrasado
más viva en él que conmigo.
6.
Y, porque a amarle me anime,
en mi corazón imprime
las llagas que tuvo en sí.
Y de tu Hijo, Señora,
divide conmigo ahora
las que padeció por mí.
7.
Hazme contigo llorar
y de veras lastimar
de sus penas mientras vivo.
Porque acompañar deseo
en la cruz, donde le veo,
tu corazón compasivo.
8.
¡Virgen de vírgenes santas!,
llore ya con ansias tantas,
que el llanto dulce me sea.
Porque su pasión y muerte
tenga en mi alma, de suerte
que siempre sus penas vea.
9.
Haz que su cruz me enamore
y que en ella viva y more
de mi fe y amor indicio.
Porque me inflame y encienda,
y contigo me defienda
en el día del juicio.
10.
Haz que me ampare …