FINES DE LA ASOCIACIÓN PARA LA DEFENSA DEL VALLE DE LOS CAÍDOS

A mediados de 2009 un grupo de ciudadanos crean la «Asociación para la Defensa del Valle de los Caídos». Este pequeño grupo de españoles, tienen como nexo común fundamental su estado de alarma ante las recientes noticias y asombrosos acontecimientos sobre el Valle de los Caídos, monumento erigido en mitad del siglo pasado,como símbolo de reconciliación entre las dos tristemente famosas Españas que se enfrentaron en la guerra civil de 1936.

El Valle de los Caídos, olvidado en atención y mantenimiento por todos los gobiernos de la democracia y hoy salvajemente atacado desde la esferas del poder, es un monumento que consideramos que tenemos la obligación de defender en todos los frentes que tiene abiertos en su contra, y que por desgracias, son muchos.

Por ello la Asociación Para la Defensa del Valle de los Caídos se marca desde el primer minuto de su existencia los siguientes objetivos fundamentales (extraído de los estatutos):

  • Defensa del monumento denominado “Monumento Nacional a los Caídos”, sito en el Valle de Cuelgamuros, término municipal de San Lorenzo de el Escorial (Madrid) en su conjunto monumental, arquitectónico, ecológico, histórico artístico y religioso.
  • Promoción desarrollo y divulgación de la construcción del Valle de los Caídos, y su carácter de reconciliación entre los españoles.
  • La promoción y divulgación de un mayor conocimiento de la función, composición, técnicas y doctrina que dieron lugar a la obra de la Basílica del Valle de los Caídos y del conjunto entero del Valle.
  • Atención a quienes soliciten información sobre los enterramientos en el Valle de los Caídos y gestión de la localización de los restos en la Basílica.

Esta asociación nace en un momento especialmente complicado para el Valle de los Caídos. Las autoridades en una decisión que supone un grave caso de recorte de libertades , han cerrado el Valle, dejando tan solo abierta la Basilica para el culto una hora diaria. Al mismo tiempo se proponen actuaciones de mantenimiento que bordean la locura y se anuncian obras de mantenimiento que nunca comienzan. Mientras tanto se hostiga de forma grave a la Comunidad religiosa que desde hace mas de 50 años abnegadamente cumplen con su obligación de rezar por todos y cada uno de los restos de los españoles que, de ambos bandos de la contienda, reposan en los osarios de la Basilica, restos de los cuales, los monjes benedictinos, son custodios.

Trabajo tenemos, y mucho, para cumplir nosotros también las obligaciones que nos hemos marcado, y que no admiten demora alguna.