El Papa Francisco pidió a los fieles que sientan "vergüenza" de pecar, porque la vergüenza por el pecado, por el mal cometido, "es una gracia" necesaria para acceder a la misericordia de Dios.
Así se expresó durante la Misa celebrada este lunes 9 de marzo en la Casa Santa Marta, por primera vez televisada por voluntad del mismo Pontífice para permitir a los fieles que lo deseen seguir las celebraciones en unión de oración con el Papa tras las medidas restrictivas adoptadas para evitar la propagación del coronavirus COVID-19.
Estas medias implican la suspensión hasta el próximo 15 de marzo de las Audiencias Generales de los miércoles, del rezo del Ángelus dominical desde el Palacio Apostólico, y la celebración de la Misa diaria en Casa Santa Marta sin la asistencia de fieles, entre otras medidas.