El apóstata homosexual Jim McDermott cree que la iglesia necesita “santos homosexuales”

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Jesuita homosexual cree que la Iglesia necesita “santos homosexuales”

Jim McDermott se viste como un laico pero al parecer es un jesuita (aclaremos este apóstata, es un disidente jesuita que en contradicción con la Ley Natural se auto define como un ‘gay’ y abiertamente desafía la doctrina católica, contradice la Escritura y se burla de Dios en las redes sociales). El 2 de junio escribió en America Magazine que, “La Iglesia Católica necesita santos homosexuales”. Debido a su pobre educación jesuita, es posible que McDermott no sepa (que  existen), los Santos Mártires de Uganda (protectores contra la homosexualidad) en el reino histórico de Buganda. Fueron ejecutados en 1885 por orden del rey Mwanga II porque resistieron sus avances homosexuales. En el artículo, McDermott se llama a sí mismo homosexual. Es editor asociado de America Magazine (Es decir cómplice del apostata James Martin).

(3 de junio Celebramos los Santos Mártires de Uganda Protectores contra la homosexualidad, el paganismo y la apostasía y 26 de junio San Pelayo de Córdoba adolescente cristiano mártir por rechazar el islam y la homosexualidad)

Redacción incorrecta. McDermott recuerda que hace un par de años, estaba en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles en Los Ángeles mirando los tapices de los santos que cubrían las paredes de la iglesia. Cita: “De repente me di cuenta de que ninguna de estas personas ha sido identificada como gay, lesbiana, bisexual o transgénero, aunque indudablemente algunas de ellas lo eran”. McDermott no nos dice por qué sabe esto. Y agrega: “De hecho, la Iglesia Católica aún tiene que reconocer a un solo santo homosexual”. Esta frase debe reformularse: La Iglesia puede reconocer a un santo que ha luchado y vencido las tentaciones homosexuales.

¿Por qué se queja? McDermott se queja de que los católicos siguen entendiendo que los actos homosexuales están mal, por mucho que Francisco haya intentado "normalizar" este vicio. Dice correctamente que cada uno de nosotros nace a imagen de Dios. Sin embargo, cuando pecamos, esta imagen se destruye". Con un tono quejoso, típico de los ideólogos del homosexismo, dice que si los homosexuales son hijos de Dios, entonces deberían recibir el mismo cuidado y respeto que todos los demás. No tiene motivos para quejarse: Los homosexuales pueden ir a la confesión donde pueden ser limpiados de sus pecados - como cualquier otro pecador.

El artículo de McDermott revela una tendencia en la Iglesia del Vaticano II a blanquear los pecados aprobados por los poderosos, como los actos homosexuales, el aborto, la eutanasia, la falta de asistencia a la misa dominical, la negación de partes de la doctrina católica, en lugar de confesarlos. Esta es la razón por la que la confesión ha sido sustituida por intentos de reemplazar la religión de Cristo por una ideología hecha por uno mismo. Esta ideología es una proyección del propio ego en el cielo, la divinización de la propia autojustificación, y por tanto una forma de ateísmo. 

 

El Papa Pablo III, Concilio de Trento, sesión 6, cap. 15:

“… la doctrina de la divina ley, que excluye del reino de Dios, no sólo los infieles, sino también los fieles que caen en la fornicación, los adúlteros, afeminados, sodomitas, ladrones, avaros, vinosos, maldicientes, arrebatadores (1 Cor. 6:9), y todos los demás que caen en pecados mortales; pues pueden abstenerse de ellos con el auxilio de la divina gracia, y quedan por ellos separados de la gracia de Cristo.”

El homosexual Jim McDermott no solo peca mortalmente sino que ademas no tiene fe.

QUIEN NIEGA UN SOLO ARTÍCULO DE LA FE NO TIENE FE SINO OPINIÓN: SANTO TOMÁS DE AQUINO

Ahora bien, es evidente que quien se adhiere a la enseñanza de la Iglesia como regla infalible presta su asentimiento a todo cuanto enseña la Iglesia. De lo contrario, si de las cosas que enseña la Iglesia admite las que quiere y excluye las que no quiere, no asiente a la enseñanza de la Iglesia como regla infalible, sino a su propia voluntad. Así, es del todo evidente que el hereje que de manera pertinaz rechaza un solo artículo no está preparado para seguir en su totalidad la enseñanza de la Iglesia . Es, pues, evidente que el hereje que niega un solo artículo no tiene fe respecto a los demás, sino solamente opinión, que depende de su propia voluntad.

Congregación para la Doctrina de la Fe  « Profesión de Fe y del Juramento de fidelidad al asumir un oficio que se ha de ejercer en nombre de la Iglesia »

PROFESIÓN DE FE (vatican.va) “También acepto y sostengo firmemente todas y cada una de las propuestas definitivas de la Iglesia sobre la enseñanza de la fe y de la moral”. 

Creo, también, con fe firme, todo aquello que se contiene en la Palabra de Dios escrita o transmitida por la Tradición, y que la Iglesia propone para ser creído, como divinamente revelado...

Acepto y retengo firmemente, asimismo, todas y cada una de las cosas sobre la doctrina de la fe y las costumbres propuestas por la Iglesia de modo definitivo.

JURAMENTO DE FIDELIDAD
AL ASUMIR UN OFICIO
QUE SE HA DE EJERCER EN NOMBRE DE LA IGLESIA

(Fórmula que deben utilizar los fieles cristianos a los que se refiere el canon 833, 5-8)

Yo, N., al asumir el oficio..., prometo mantenerme siempre en comunión con la Iglesia católica, tanto en lo que exprese de palabra como en mi manera de obrar.

...

En el ejercicio del ministerio que me ha sido confiado en nombre de la Iglesia, conservaré íntegro el depósito de la fe y lo transmitiré y explicaré fielmente; evitando, por tanto, cualquier doctrina que le sea contraria.

 

Por lo tanto según la Congregación para la Doctrina de la Fe Jim McDermott, no está en plena comunión con la Iglesia Católica. Jim McDermott es un apóstata que no profesa la fe católica.

Observe cómo este apóstata con la complicidad de Bergoglio y James Martin  desafía la Ley de Dios, niega la Sagrada Escritura y se burla de Dios.

 

2 Pedro 3:3 

Y, ante todo, debéis saber cómo en los postreros días vendrán con sus burlas escarnecedores (impostores artificiosos), que viven según sus propias concupiscencias

Esta carta de San Pedro dice que estos son hombres indoctos e inconstantes que pervierten la Escrituras para su propia perdición.

El apóstata Jim McDermott de manera burlona negó  la Palabra de Dios, escribiendo en Twitter, en respuesta a un post que decía: Todos los santos creían en Sodoma y Gomorra... ¿Tenían prejuicios bastante serios?

R/ "También creían que las sanguijuelas curarían enfermedades, que la tierra era plana y que los cometas eran signos de un destino cósmico. Pero claro, concentrémonos en una historia ridícula sobre Dios destruyendo un pueblo que ridículamente no era más que depredadores homosexuales. Eso definitivamente suena creíble.

 

Luego escribió: Sé que estoy muy atrasado en esto, pero me doy cuenta de que hay personas que piensan que la historia de Sodoma y Gomorra realmente sucedió.

 

San Pedro Damián escribió que los sodomitas le declaran una guerra abominable a Dios.  

“[El vicio de la sodomía] conduce al error, elimina totalmente la verdad de la mente engañada... Se abre al Infierno y cierra las puertas del Paraíso.” “[El vicio de la sodomía] Lo moviliza a pertenecer a la milicia de los espíritu maligno. Le Obliga a luchar una abominable guerra contra de Dios. [El vicio de la sodomía] separa a la infeliz alma de la compañía de los ángeles, privándolo de su excelencia, llevándolo cautivo bajo su yugo dominante.”(...) Una vez que esta serpiente venenosa ha hundido sus colmillos en este desgraciado, le priva de toda sentido moral, su memoria falla, y la visión de la mente se oscurece. Sin tener en cuenta a Dios, él también se olvida de su propia identidad.” 

 

Pero los cobardes, los incrédulos, los depravados, los homicidas, los lujuriosos (los que cometen inmoralidades sexuales), los hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su herencia en el estanque ardiente de fuego y de azufre: ésta es la segunda muerte'. Apocalipsis 21:8

Este apostata comparte la misma herejía y apostasía de James Martin, quien también niega la Escritura, desafía las enseñanzas de la Iglesia, se burla de Dios y celebra el orgullo gay en desafío a la Ley Natural de Dios.

Observen como la mayoría de estos apostatas se visten de civil en rebelión contra el Sacerdocio católico pero cuando van a predicar sus herejías utilizan algún distintivo sacerdotal para respaldar sus herejías. Se creen con el derecho de hablar a nombre de la Iglesia para contradecir sus enseñanzas y a Dios mismo. 

Apostasía ab ordine:

La apostasía ab ordine, de acuerdo a la disciplina actual (1907) de la Iglesia, es el abandono de la vestimenta clerical y el estado de los clérigos que han recibido las órdenes mayores.

El Padre Félix Sardà dijo: "El clérigo apóstata es el primer factor que busca el diablo para esta su obra de rebelión. Necesita presentarla en algún modo autorizada a los ojos de los incautos, y para eso nada le sirve tanto como el refrendo de algún ministro de la Iglesia. Y como, por desgracia, nunca faltan en ella clérigos corrompidos en sus costumbres, camino el más común de la herejía; o ciegos de soberbia, causa también muy usual de todo error; de ahí que nunca le han faltado a éste apóstoles y fautores eclesiásticos, cualquiera que haya sido la forma con que se ha presentado en la sociedad cristiana".

Santa Hildegarda escribió que en la época del hijo de perdición los herejes podrán predicar abiertamente sus herejías.

“[El] moderado [Modernista] es el verdadero tipo satánico; suyo es el mal enmascarado” (Padre Félix Sarda y Salvany, El liberalismo es un pecado)

En este Post el apóstata James Martin finge religiosidad hablando de los santos mártires de Uganda pero mintiendo maliciosamente y desviando el foco de atención hacia los 'refugiados' para concluir contradiciendo la verdadera historia.

El apostata disidente jesuita y activista gay James Martin escribió en Twitter el 3 de junio en la Fiesta de los Santos Mártires de Uganda:

«Hoy es la fiesta de los Mártires de Uganda, a los que tengo gran devoción. Cuando trabajé con refugiados en África Oriental en la década de 1990, les rezaba a menudo y visitaba dos veces su santuario en Namugongo, cerca de Kampala. Los refugiados de Uganda los mencionaron con frecuencia y...

...los nombres de los mártires fueron utilizados a menudo por las iglesias de África Oriental, especialmente Kizito, el más joven, un nombre que a menudo adoptan los grupos de jóvenes. (Escribí sobre ellos en mi libro "Mi vida con los santos"). Lamentablemente, hoy en día su fiesta se usa a menudo como un arma contra las personas LGBTQ. ¿Por qué?....»

 

“El error no se manifiesta tal cual es, por temor de que, apareciendo desnudo, sea reconocido; sino que, adornándose artificiosamente de un vestido de verosimilitud, obra de modo que aparece a los ojos de los ignorantes más verdadero que la verdad misma”. San Ireneo

 

Pues los tales falsos apóstoles son operarios engañosos, e hipócritas, que se disfrazan de apóstoles de Cristo. 

2 Corintios 11:13

Esta secta al servicio del anticristo no tiene reparos en utilizar la otra arma del demonio, la mentira. Por ejemplo, este impostor James Martin que defiende causas izquierdistas dice que es ‘pro-vida’  mientras defiende el ‘derecho al aborto’ , a los políticos promotores del aborto y las uniones homosexuales que son infértiles, anti-vida, contrarias a la Ley Natural. Así se define el apostata Joe Biden, diciendo que personalmente está en contra del aborto pero que no impone ‘su punto de vista’ a los demás. Como el falso papa Bergoglio que, para propagar su apostasía, ha dicho que la Iglesia no tiene la Verdad Absoluta sino ‘una opinión’ privada y que el sacerdote no tiene derecho a darla ni siquiera en el confesionario. Así en Argentina desafiando las enseñanzas de la Iglesia defendió las uniones civiles homosexuales escondiendo su traición bajo una seudo-defensa  agregando que no debían equipararse al matrimonio. Así Joe Biden ‘casa civilmente’ a las parejas de homosexuales, mientras se hacen pasar por ‘buen’ católico defensor de  causas izquierdistas. Se sabe que esta secta de ‘católicos pro choice’ en Estados Unidos a la que pertenece Nancy Pelosi, Joe Biden y el mismo (anti-católico) Barak Obama fue financiada por George Soros. Y también se conoce la alianza impía entre Soros y Bergoglio. Por eso el falso papa Bergoglio es capaz da alabar a la mano derecha de George Soros, Emma Bonino. 

2 Corintios 11:13-15

 pues no son más que falsos apóstoles y engañadores que se disfrazan de apóstoles de Cristo.  Y esto no es nada raro, ya que Satanás mismo se disfraza de ángel de luz; por eso resulta muy natural que sus servidores pretendan aparecer como defensores de la justicia. ¡Pero habrán de terminar como sus hechos merecen!

 El hereje difiere del apóstata en que sólo niega una o más de las doctrinas de la religión revelada, mientras que el apóstata niega la religión misma, un pecado que siempre se ha considerado como uno de los más graves.

Hablar de Dios para contradecirlo no significa que una persona aún tenga intacta su fe; cuando lo que hace es encubrir su traición bajo la máscara de la religiosidad. Todos ellos son apóstatas que, disfrazados de religiosidad, niegan públicamente la Fe con acciones perversas que contradicen abiertamente la Ley de Dios. Además, blasfeman contra el Espíritu Santo al desafiar la Verdad Revelada, al alentar maliciosamente a las personas a obstinarse en seguir pecando, a identificarse con el pecado y sentirse orgullosos y que cometan el pecado de presunción e impenitencia final. 

1 Tesalonicenses 4:7-8

Pues Dios no nos ha llamado a vivir en impureza, sino en santidad. Así pues, el que desprecia estas enseñanzas no desprecia a ningún hombre, sino a Dios, que les ha dado a ustedes su Espíritu Santo.

El "Pastor" de Hermas, una obra escrita en Roma a mediados del siglo II, afirma positivamente que no hay perdón para aquellos que voluntariamente han negado al Señor.

La infidelidad positiva, la cual es un pecado contra la fe, el más grave de todos los pecados, la apostasía. 

Apostasía (apo, desde, y stasis, estación, de pie, o posición) la palabra misma en su sentido etimológico significa la deserción de un puesto, el renunciar a un estilo de vida; el que voluntariamente abraza un estado definido de vida no puede dejarlo, por lo tanto, sin convertirse en un apóstata.

Impunidad eclesiástica en el escándalo del Sacerdote Ignacio Periés, el amigo de Bergoglio que promueve la homosexualidad y las adopciones gays.

Farsante "sacerdote sanador" Ignacio Peries promueve la sodomía con el sello de aprobación de Bergoglio.
Hoy hay un sinfín de ejemplos de la apostasía pública de Bergoglio.

Pobre Bergoglio que va por el camino de la impenitencia final obstinado en sus herejías sin arrepentirse. Su tiempo se acerca y en lugar de retractarse acelera su apostasía.
Pregunta San Alfonso Ma de Ligorio: Cuando cortan el
árbol, ¿hacia dónde cae?… Cae hacia donde está inclinado…
"Si el árbol cayere hacia el austro
o hacia el aquilón, en cualquier lugar en que cayere, allí quedará" (Ecl. 11, 3)
Donde caiga, en la hora
de la muerte, el árbol de tu alma, allí
quedará para siempre.

 Sobre San Pelayo y la adhesión sacerdotal a las pastorales apóstatas

Mª Virginia Olivera ( Católica de Argentina. Profesora y Licenciada en Artes de la Universidad de Buenos Aires):

Hace unos siglos, el joven San Pelayo –cuya fiesta celebramos los católicos el 26 de junio-  dio su vida en defensa de la pureza frente a las seducciones degeneradas del Califa de Córdoba, donde habiendo sido cautivo observó que los altos cargos se compraban con la prostitución de las conciencias primero, y luego de los cuerpos.  

La política de Abderramán III -que hoy es la del mundo en general-, los hacía instrumentos útiles y manejables a costa de la apostasía, mereciendo así la confianza del tirano y a cambio se le prestaba todo tipo de “servicios”. Pasito a paso se llega a puerto, para bien y para mal.

(...)

A veces nos rasgamos las vestiduras por lo que sucede en Alemania, pero mientras tanto hemos de examinar también nuestras propias parroquias y diócesis, porque la verdadera y más grave pandemia que estamos padeciendo en el mundo es la gran Apostasía (Cf. Catecismo de la Iglesia Católica n.675-677) y ésta va conquistando los ánimos poco a poco, como un tufo que todo lo penetra. 

Arzobispo Chaput: «El padre Martin no habla con autoridad en nombre de la Iglesia

El Cardenal Burke también se hizo eco de la advertencia de Viganò de que ciertos miembros de la jerarquía están trabajando para cambiar la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad.

También destacó el "apoyo que los eclesiásticos le dan al jesuita James Martin, quien tiene una posición 'abierta' y equivocada sobre la homosexualidad", calificándola de "un problema".

Cdl. Burke: El Padre James Martin “no es coherente” con la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad. 

Papa Benedicto XVI

Sodoma y Gomorra fueron destruidas porque en ellas ya no había la posibilidad de trasformar el mal en bien

En el capítulo 18 del libro del Génesis; se cuenta que la maldad de los habitantes de Sodoma y Gomorra estaba llegando a tal extremo que resultaba necesaria una intervención de Dios para realizar un acto de justicia y frenar el mal destruyendo aquellas ciudades. […] Abraham presenta a Dios la necesidad de evitar una justicia sumaria: si la ciudad es culpable, es justo condenar su delito e infligir el castigo, pero —afirma el gran patriarca— sería injusto castigar de modo indiscriminado a todos los habitantes. Si en la ciudad hay inocentes, estos no pueden ser tratados como los culpables. Dios, que es un juez justo, no puede actuar así, dice Abraham, con razón, a Dios. […] Abraham —como recordamos— hace disminuir progresivamente el número de los inocentes necesarios para la salvación: si no son cincuenta, podrían bastar cuarenta y cinco, y así va bajando hasta llegar a diez. […] Pero ni siquiera diez justos se encontraban en Sodoma y Gomorra, y las ciudades fueron destruidas. Una destrucción que paradójicamente la oración de intercesión de Abraham presenta como necesaria. Porque precisamente esa oración ha revelado la voluntad salvífica de Dios: el Señor estaba dispuesto a perdonar, deseaba hacerlo, pero las ciudades estaban encerradas en un mal total y paralizante, sin contar ni siquiera con unos pocos inocentes de los cuales partir para transformar el mal en bien. (Benedicto XVI. Audiencia general, 18 de mayo de 2011)