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Cardenal: “Contactos desastrosos con el Vaticano”, “No hay esperanza”

La situación de la Iglesia en China es “terrible, terrible. Terrible. Terrible”, dijo el 3 de diciembre el cardenal Joseph Zen en el sitio web NewBloommag.net.

Al hablar sobre la historia de sus contactos con el Vaticano, los llama “simplemente desastrosos”.

Zen llama “un hombre muy equilibrado” al ex prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el cardenal Josef Tomko, de 95 años.

Pero su sucesor, el actual arzobispo de Nápoles, Crescenzio Sepe, “no fue bueno”, y su sucesor, el cardenal Ivan Días (+2017), fue “incluso peor”.

Un grupo mantiene el poder – Benedicto XVI fue un intruso

Zen cree que “hay un grupo en la Santa Sede” que mantiene el poder mientras, por ejemplo, Benedicto XVI y su secretario de Estado, el cardenal Tarsicio Bertone, “fueron considerados como intrusos”, porque no pertenecían a ese grupo: “en la Secretaría de Estado, los que tenían el poder real no eran los funcionarios de más alto rango, sino los que estaban debajo de ellos”.

Zen explica que el actual secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, ya durante el pontificado de Benedicto XVI saboteó, como subsecretario, los esfuerzos de Benedicto y sus negociaciones con China.

Por eso Zen confrontó a Benedicto: “Usted me hizo cardenal. Usted dijo que yo debería ayudarle con la Iglesia en China. ¿Pero qué puedo hacer? ¡Nada! Nada. Ellos tienen el poder. Y usted no dice nada. Usted no me ayuda, ¿cómo puedo ayudarle?”.

Después Francisco sucedió a Benedicto. Según Zen, él tiene “poco respeto por sus predecesores” y “está cerrando todo lo hecho por Juan Pablo II y por el papa Benedicto”.

Zen dice que Francisco ofrece “palabras no sinceras” al afirmar que está en continuidad con sus predecesores, pero esto es “un insulto”.

El acuerdo con China fue rechazado por Benedicto XVI

El cardenal Zen revela que Parolin y Dias prepararon un acuerdo con los comunistas chinos ya en el 2010. Según él, Benedicto dijo no y “no pudieron firmar el acuerdo”. Sin embargo, él no tiene evidencia de esto: “pienso que el acuerdo firmado ahora debe ser exactamente el que el papa Benedicto que negó a firmar”.

Zen no ha visto todavía el acuerdo del 2018: “soy uno de los dos cardenales chinos vivientes y no he podido tener una visión de ese acuerdo, y he estado tres veces en Roma” (enero del 2018, octubre del 2018 y junio del 2019).

Sin embargo, Zen cree que él tiene “personalmente relaciones maravillosas” con Francisco, “incluso ahora”, aunque Francisco no responde sus cartas y hace lo contrario de lo que Zen sugiere.

Zen identifica tres temas terribles: “un acuerdo secreto, la legitimación de los siete obispos excomulgados y en definitiva la matanza de la Iglesia clandestina china.

El cardenal cree que el secretario de Estado, Pietro Parolin, está manipulando a Francisco: “Es un verdadero misterio cómo un hombre de la Iglesia, dado todos sus conocimientos de China, pudo hacer lo que está haciendo ahora? La única explicación no es la fe. Es un éxito diplomático. Vanagloria”.

Zen concluye la entrevista diciendo: “no hay esperanza, no hay esperanza en absoluto. No hay esperanza”.

Publicado originalmente en inglés el 4 de diciembre, en Cardinal: “Contacts With Vatican Disastrous”, “There Is No Hope”

Traducción al español por: José Arturo Quarracino