Müller: “Benedicto cayó en una trampa”

No hay “la menor duda” de que Benedicto XVI recuerda bien que “no sabía nada” del pasado pedófilo del sacerdote de Essen y que dice la verdad “objetiva y subjetivamente”.
A los activistas de los medios de comunicación que llaman “mentiroso” a Ratzinger Müller los califica de “agitadores sin conciencia y predicadores del odio anticatólico”. Afirma que el informe de Múnich es un trabajo encargado para promover “una Iglesia nacional alemana descatolizada”. Las aguas sucias se dirigen desde el bufete de Múnich a los molinos “sinodales” de los obispos alemanes.
Casi al mismo tiempo que Müller hizo su declaración, Benedicto XVI describió sus declaraciones al sitio web KNA.de como “objetivamente falsas”. Pero su corrección sólo se refiere al hecho, que no es relevante para la acusación, de que estuvo presente en una reunión de la curia arquidiocesana de Múnich sobre el sacerdote en 1980.
Imagen: © Mazur, CC BY-NC-SA, #newsYsrqgtnesi
