María supo “escuchar” la Palabra; en Ella la Palabra se hizo carne

Hagamos conocer y amar a María

El papa emérito Benedicto XVI, en su Exhortación Post-sinodal Verbum Domini, sobre la Palabra de Dios en la vida y misión de la Iglesia insta a los investigadores “a profundizar lo más posible en la relación entre Mariología y Teología de la Palabra”. María, "Madre de la Palabra de Dios" y "Madre de la fe", aparece como modelo para escuchar la Palabra de Dios.

En la Anunciación, María escucha con su corazón el anuncio del ángel Gabriel. El libro del Deuteronomio presenta la escucha de la Palabra de Dios como el primero de los mandamientos y el fundamento del amor de Dios que debe vivir el Pueblo Elegido: "Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor. Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tus fuerzas” (cf. Dt 6, 4).

Un proverbio africano dice que “a la mujer se la fertiliza por el oído", una forma de unir la escucha, el amor y el don de la vida.

En María, mujer judía, primera cristiana, el Antiguo Testamento pasa al Nuevo Testamento para cumplirse en Jesús, nacido de una mujer (cf. Gálatas 4, 4): "María es también el símbolo de la apertura a Dios y a los demás; de la escucha activa que interioriza, asimila y donde la Palabra divina se convierte en la matriz de la vida". La Palabra de Dios se convierte en la matriz de una nueva forma de pensar, orar, hablar y actuar.

Hermano Manuel Rivero O.P., Catedral de Saint-Denis, Reunión (Francia), 24 de enero de 2020.