Revestíos de toda la Armadura de Dios
“Efesios 6,11”
Así como en el deporte, así deberíamos tener la misma ofensiva para combatir a las fuerzas del mal, a los ejércitos del enemigo, con aplomo, con tenacidad, con garra, con furia santa: de rodillas, en oración y con Biblia en mano, no dejando al enemigo ninguna, ninguna oportunidad, ninguna salida. Así debe ser un buen soldado de Dios. Porque no tenemos lucha contra carne ni sangre sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestes "Efesios 6.12". (Por cierto los playoff 2012 de la nba están buenísimos).