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Irapuato
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28/01 Santo Tomás de Aquino, patrón universitario. Tomás de Aquino, en italiano Tommaso D'Aquino, (nacido en Roccasecca (Lacio) o Belcastro (Calabria[1] ), Italia, a finales de 1224 o inicios de 1225…Más
28/01 Santo Tomás de Aquino, patrón universitario.

Tomás de Aquino, en italiano Tommaso D'Aquino, (nacido en Roccasecca (Lacio) o Belcastro (Calabria[1] ), Italia, a finales de 1224 o inicios de 1225 – † Abadía de Fossanuova, en la actual Provincia de Latina, 7 de marzo de 1274), fue un teólogo y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores, y es el principal representante de la tradición escolástica, y fundador de la escuela tomista de teología y filosofía. Es conocido también como Doctor Angélico o Doctor Común, y es considerado santo por la Iglesia Católica. Su trabajo más conocido es la Suma Teológica, tratado en el cual pretende exponer de modo ordenado la doctrina católica. Canonizado en 1323, fue declarado Doctor de la Iglesia en 1567 y santo patrón de las universidades y centros de estudio católicos en 1880. Su festividad se celebra el 28 de enero.
Emitido en diocesisTV el 28-1-2008. "Los números uno", Encarni Llamas presenta una breve biografía del santo de cada día.
nicomaconerd
Es breve pero claro,quizas un poco superficial
Irapuato
El Evangelio de Hoy Viernes 28 de Enero 2011
Lecturas del día:
*Lectio Divina (Primera Lectura)
*El Evangelio de hoy
Primera Lectura (Lectio Divina)
Hebreos 10, 32-39
Hermanos: Recuerden aquellos primeros días en que, recién iluminados
por el bautismo, tuvieron ustedes que afrontar duros y dolorosos
combates. Unas veces fueron expuestos públicamente a los insultos y
tormentos. Otras, compartieron …Más
El Evangelio de Hoy Viernes 28 de Enero 2011
Lecturas del día:
*Lectio Divina (Primera Lectura)
*El Evangelio de hoy
Primera Lectura (Lectio Divina)
Hebreos 10, 32-39
Hermanos: Recuerden aquellos primeros días en que, recién iluminados
por el bautismo, tuvieron ustedes que afrontar duros y dolorosos
combates. Unas veces fueron expuestos públicamente a los insultos y
tormentos. Otras, compartieron los sufrimientos de los hermanos que
eran maltratados, se compadecieron de los que estaban en la cárcel y
aceptaron con alegría que los despojaran de sus propios bienes,
sabiendo ustedes que están en posesión de otros, mejores y
perdurables.
Por lo tanto, no pierdan la confianza, pues la recompensa es grande.
Lo que ahora necesitan es la perseverancia, para que, cumpliendo la
voluntad de Dios, alcancen lo prometido.
Atiendan a lo que dice la Escritura: Pronto, muy pronto, el que ha de
venir vendrá y no tardará; y mi justo, si permanece fiel, vivirá; pero
si desconfía, dejará de agradarme. Ahora bien, nosotros no somos de
los que desconfían y perecen sino hombres de fe, destinados a
salvarnos.
+ Meditatio
Hoy en día asistimos a una pérdida progresiva del valor de la
FIDELIDAD. El consumismo y materialismo en el que muchas veces nos
vemos envueltos nos hace con facilidad cambiar de marca, de
utensilios, se va creando en nosotros la necesidad del cambio y del
utilitarismo, que se reduce a: ya no me sirve, lo cambio o lo tiro;
uno nuevo... pues mejor. Esto afecta todas las áreas de la vida. Con
gran tristeza, vemos cómo muchos de nuestros jóvenes inician el
matrimonio con estas ideas destructoras. En muchos de ellos no está el
deseo de que sea para toda la vida, si las cosas no empiezan a caminar
como ellos pensaban inmediatamente surge la separación. Muchos de
ellos no están dispuestos a luchar por lo que decían amar. Nada en
este mundo que esté relacionado con el amor es fácil, pues el egoísmo,
promovido por el demonio y sus aliados, lo alimenta y busca
continuamente destruir. En la vida de fe sucede lo mismo, muchos
quisieran una religión a su manera, que no apriete, que no incomode,
en donde no exista el compromiso y la persecución. Nuestra lectura nos
invita a ser fieles y a luchar por el amor, por nuestros valores, por
nuestra fe y no ser como veletas movidas por el viento del egoísmo y
de los intereses del mundo.
¡Ánimo!, nosotros somos hombres y mujeres de fe, y la fe y el amor
finalmente vencerán.
+ Oratio
Señor, tú eres mi herencia, mi porción, la parte que me toca, tú mi
riqueza y felicidad, eso es algo que no cambiaré por nada, te espero
con ansia, Señor, anhelo la eternidad disfrutando de tu profundo e
incontenible amor. Ciertamente cuidaré de los bienes temporales que me
permitas disfrutar en esta vida e incluso haré que den fruto, pero
nada de eso se compara con vivir en ti.
+ Operatio
Hoy meditaré en aquellas cosas en que soy muy consumista, en aquellas
cosas o situaciones que estoy tomando como desechable lo que aún puede
funcionar.
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El Evangelio de hoy
Marcos 4, 26-34
En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: "El Reino de Dios se parece
a lo que sucede cuando un hombre siembra la semilla en la tierra: que
pasan las noches y los días, y sin que él sepa cómo, la semilla
germina y crece; y la tierra, por sí sola, va produciendo el fruto:
primero los tallos, luego las espigas y después los granos en las
espigas. Y cuando ya están maduros los granos, el hombre echa mano de
la hoz, pues ha llegado el tiempo de la cosecha".
Les dijo también: "¿Con qué compararemos el Reino de Dios? ¿Con qué
parábola lo podremos representar? Es como una semilla de mostaza que,
cuando se siembra, es la más pequeña de las semillas; pero una vez
sembrada, crece y se convierte en el mayor de los arbustos y echa
ramas tan grandes, que los pájaros pueden anidar a su sombra".
Y con otras muchas parábolas semejantes les estuvo exponiendo su
mensaje, de acuerdo con lo que ellos podían entender. Y no les hablaba
sino en parábolas; pero a sus discípulos les explicaba todo en
privado.
+ Reflexión
Como continuación de la explicación de la parábola del sembrador,
Jesús nos presenta cómo es que crece el Reino. Nos deja ver que no es
nuestro esfuerzo el que hace crecer el Reino sino la fuerza y la vida
que ya está en él. A veces pensamos que nuestro esfuerzo de
evangelización no está resultando y no da fruto. Sin embargo, la
acción escondida de Dios en el corazón de aquellos con los que
compartimos la Palabra y nuestro testimonio cristiano, va haciendo
germinar en ellos la vida del Espíritu. Por otro lado, parecería que
nuestro esfuerzo es muy pequeño, sin embargo, ese pequeño grano, ese
esfuerzo por hacer que Dios sea conocido y amado, crecerá con la
gracia de Dios, hasta ser un gran árbol. Por lo que no debemos de
desanimarnos; lo que Dios espera de nosotros es que ayudemos a
esparcir la semilla y que tengamos fe en el poder que encierra en sí
mismo el Evangelio y el testimonio cristiano.
Permite que el amor de Dios llene hoy tu vida. Ábrele tu corazón.
Como María, todo por Jesús y para Jesús.
Pbro. Ernesto María Caro
Irapuato
SANTO TOMÁS de AQUINO
Presbítero y Doctor de la Iglesia
(1226-1274)
Santo Tomás de Aquino, el Doctor Angélico, es el patrono de los estudiantes. Nacido en Aquino de noble familia, estudió en Montecasino y en Nápoles, donde se hizo fraile dominico. Esto no le hizo gracia a su madre, pues eran otros los planes de la altiva condesa, y lo encerró en el castillo. Allí sucedió la conocida escena. Una …Más
SANTO TOMÁS de AQUINO
Presbítero y Doctor de la Iglesia
(1226-1274)
Santo Tomás de Aquino, el Doctor Angélico, es el patrono de los estudiantes. Nacido en Aquino de noble familia, estudió en Montecasino y en Nápoles, donde se hizo fraile dominico. Esto no le hizo gracia a su madre, pues eran otros los planes de la altiva condesa, y lo encerró en el castillo. Allí sucedió la conocida escena. Una noche llevaron a una mujer a su habitación para seducirlo. Tomás venció como se vencen las tentaciones contra la pureza. Cogió rápidamente un tizón encendido y ahuyentó a la mujer. Pronto se durmió, y he aquí que dos ángeles le despertaron y le ciñeron un cordón incandescente. Ya no tuvo más tentaciones de impureza.
No perdía el tiempo en la torre del castillo. Rezaba y leía los libros que le lograba pasar un fraile dominico. Un día con una estratagema le ayudó a evadirse. Poco después Tomás estudiaba en Colonia y en París, como discípulo de San Alberto Magno. Fue un alumno modelo. Embebido en los estudios, no participaba en recreos ni discusiones. Por ello lo llamaban «el buey mudo». Sí, dijo su maestro, pero sus mugidos resonarán en todo el mundo.
Tomás era el primero en cumplir los consejos que un día daría a un estudiante: No entres de golpe en el mar, sino vete a él por los ríos, pues a lo difícil se ha de llegar por lo fácil. Sé tardo para hablar. Ama la celda. Evita la excesiva familiaridad, que distrae del estudio. Aclara las dudas. Cultiva la memoria. No te metas en asuntos ajenos no pierdas tiempo.
El papa le ofreció el arzobispado de Nápoles. Pero era otra la misión de Tomás. Se la mostró un día su maestro: la doctrina cristiana estaba en peligro de contaminarse con el aristotelismo averroísta, importado de España. Era preciso absorberlo, asimilarlo, cristianizarlo. Era la gran hazaña a que estaba llamado Tomás, y que realizaría soberanamente.
San Alberto traspasó la cátedra de París a Tomás. Empezó comentando a Pedro Lombardo, el Maestro de las Sentencias, y asombró a todos por su claridad y profundidad. Sus comentarios sobre Aristóteles, su atrevimiento al «bautizarlo», le atrajo la envidia y enemistad de muchos profesores. Fue una lucha encarnizada, acosado por agustinianos y averroístas. Su método quedó consagrado al canonizarle el papa Juan XXII el año 1324.
Tomás enseñaba, predicaba y escribía. Obras principales: Sobre la Verdad, Suma contra gentiles, comentarios al Cantar de los Cantares. Su obra maestra es la Suma Teológica, síntesis que recoge todo su pensamiento. Armoniza el caudal filosófico y religioso griego y cristiano, conciliación audaz y lograda, una de las mayores hazañas del pensamiento humano.
Su vida de oración era profunda. Nunca se entregaba al estudio sino después de la oración, afirma su amigo fray Reginaldo. Sus escritos sobre el Santísimo Sacramento y sus sermones nos hacen dudar si predominaba en él el teólogo o el místico. Derramaba muchas lágrimas en la Misa y caía frecuentemente en éxtasis. Una vez oyó del Señor: «Bien has escrito de mí, Tomás. ¿Qué recompensa quieres? - Ninguna, sino a Ti, Señor», respondió.
Un día tuvo una «visión» celebrando Misa. Estaba por entonces escribiendo en la Suma sobre los Sacramentos, y ya no escribió más. «No puedo más, repetía cuando le insistían a que acabase. Lo que he escrito, comparado con lo que he visto, me parece ahora como el heno. No insistáis, no puedo más».
Invitado por el papa Gregorio X, se dirigió al concilio de Lyon. Se sintió enfermó en el camino. Le acogieron en el monasterio de Fossanova. Herido en la «visión» parcial, el 7 de marzo marchó a la visión plena.
www.infinitelove.ca/cal/esp/03-07.htm