Cuando la monja alemana Anna Catherine Emmerich vio que la masonería eclesiástica alemana traicionaba al Papa e impuso un obispo masónico para reemplazarlo, explicó claramente que este Papa impostor no tenía autoridad espiritual. Y que el Papa impostor es quien construye la antiiglesia del anticristo. Ser antipapa es un delito que recibe la pena canónica más alta. Bergoglio ha consumado su traición para que se cumpla la Escritura, así como Judas traicionó a Cristo y lo vendió, así este hijo de perdición ha traicionado a Cristo y a la Iglesia y la crucifica. Y el pecado de Bergoglio es mayor que el de Judas porque además de traicionar a Cristo, usurpa la silla de Pedro y de Dios mismo, por ejemplo al pretender ser un dios que puede cambiar el sexo de los travestis homosexuales masculinos, llamándolos niñas y haciendo lo mismo. Con lesbianas travestis y personas que se consideran binarias, vemos como Bergoglio desafía maliciosamente la Ley de Dios y se hace pasar por Dios para pisotear las leyes de Dios y sus mandamientos y en nombre de Dios está arrastrando muchas almas a la perdición eterna. Cómo Lucifer arrastró consigo a los ángeles apóstatas que se rebelaron contra Dios.

El apostata Bergoglio que tanto escuda su apostasía detrás de la interpretación herética del Vaticano II Contradice el mismo Vaticano II que hizo un llamado UNIVERSAL A LA SANTIDAD.

Dios dispuso, con su gran bondad, que todo lo que había revelado para la salvación de todas las gentes se conservara íntegro para siempre y se fuera transmitiendo a todas las generaciones (CONC. VAT. II, Const. Dei Verbum,7).

Papa San Clemente I:

“Los maestros heréticos pervierten las Escrituras y tratar de entrar en el cielo con una llave falsa, porque ellos han formado sus asambleas humanas posterior a la Iglesia Católica. De la Iglesia previamente existente y verdadera, es muy claro que estas herejías posteriores, y otras que han llegado a ser desde entonces, son copias falsificadas y novedosas invenciones .”