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En recuerdo de los combatientes que libraron la mas grande, histórica y gloriosa BATALLA DE LEPANTO- el 7 de octubre de 1571. LA GLORIOSA BATALLA DE LEPANTO --LA GLORIOSA BATALLA DE LEPANTO, GLORIOUS …Más
En recuerdo de los combatientes que libraron la mas grande, histórica y gloriosa BATALLA DE LEPANTO-
el 7 de octubre de 1571. LA GLORIOSA BATALLA DE LEPANTO --LA GLORIOSA BATALLA DE LEPANTO, GLORIOUS BATTLE OF LEPANTO,
Pacocatolic
444 años tras Lepanto, la olvidada. Desde sus banderas a los naufragios,hoy
Publicado por Javier Noriega el Oct 7, 2015
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Ya las armas se encuentran, ya se embisten, ya se traban; de don Juan y el turco Alí, las galeras capitanas, furiosos tiros escupen,fieros cañones disparan, humo que los aires ciega, fuego que los hombres mata. ¡Qué de mástiles y proas desmenuzan y quebrantan, los …Más
444 años tras Lepanto, la olvidada. Desde sus banderas a los naufragios,hoy

Publicado por Javier Noriega el Oct 7, 2015

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Ya las armas se encuentran, ya se embisten, ya se traban; de don Juan y el turco Alí, las galeras capitanas, furiosos tiros escupen,fieros cañones disparan, humo que los aires ciega, fuego que los hombres mata. ¡Qué de mástiles y proas desmenuzan y quebrantan, los herrados espolones deshacen y desencajan!

Lope de Vega


El choque de civilizaciones es tan antiguo como la historia, e igualmente tan antigua es la ceguera de los hombres que las buscan, que las generan. Pero queraámoslo o no, son las bisagras, los puntos de inflexión de la historia. La batalla que hoy recordamos en espejo de navegantes, en su 444 aniversario es uno de esos puntos importantes de inflexión de la historia. En la segunda mitad del siglo XVI, los tambores de guerra sonaban musulmanes y el muftí del sultán otomano proclamaron la yihad contra Occidente.

www.abc.es/…/abci-origen-mil…
, el papa del momento si entendió que la verdadera batalla que se libraba, era la que empujaba un choque de credos, que a modo de cruel duelo hacía peligrar la propia existencia misma del Occidente cristiano y su forma de vida. Casi nada.

Y era curioso, han pasado varios siglos y la actualidad geopolítica de Oriente Medio nos parece traer ecos del pasado con extraordinaria viveza. ¿Quien duda del valor de la historia?. Es para tomársela en serio, por mucho que nos empeñemos en delegarla y degradarla al olvido…Por aquel entonces se rompió la unidad de la cristiandad (en Europa), como consecuencia de las revueltas protestantes, latente en los países del Norte.“El Norte está lleno de cosas enredadas y textos, con los ojos doloridos”, rezaban las letras de aquellos rumores de los cristianos viejos. Una grieta que el poder otomano iba a aprovechar terriblemente. Sabían lo que se hacían en esto de la estrategia. El Islam tenía su oportunidad y era el momento del zarpazo hegemónico y militar. El Imperio Otomano, la sede del poder islámico, puso su ojo y su mano claramente para controlar el Mediterráneo. Y movía ficha.

Golfo e isla de Djerba del gran cartógrafo otomano Piri Reis.

Y lo hacía de una manera diversificada, planificada, como si de una partida de ajedrez se tratara. Los corsarios allanaban el norte de África con sus continuas razzias. La enorme flota del sultán anclada en el Mediterráneo oriental dejaba bien claro su poder y magnificencia presta a acudir allí donde estableciesen. Los ejércitos islámicos a lo largo de las costas de África, el Medio y Cercano Oriente, presionaban contra el Adriático, con la consecuencia que sus numerosos ejércitos musulmanes amenazaban claramente el Imperio de los Habsburgo a través de los Balcanes.

Toma de Malta por los Otomanos 6 años antes de la batalla de Lepanto. Plaza por plaza el Mediterráneo se iba rindiendo hegemónicamente a sus pies.
Fruto de este expansionismo salvaje, tuvo como inevitable efecto la batalla de Lepanto. No había otra. Se estaban esperando. Uno de los grandes choques entre Oriente y Occidente, con la consabida victoria para la Santa Liga de las naciones cristianas. Una victoria que dejó un reguero de recuerdos conmemorativos en las ciudades Europeas, con gran importancia en su momento. Hoy, todo eso prácticamente se ha olvidado. Máxime en nuestro país, en donde la historia marítima y sus frutos se han relegado en demasiadas ocasiones al olvido. ¿Que hay de aquellos barcos?. ¿De aquellos naufragios?. ¿De aquellos marinos y soldados?. O de sus banderas, sus armas, sus gallardetes, sus tambores y sus rodelas, sus espolones, sus cañones o sus velas…Aunque parezca mentira es difícil rastrear su pista en lo material, no así afortunadamente en abundantes obras históricas, en muchos casos por autores Españoles, que han tratado magistralmente el tema. Sobre dicha cuestión, la del olvido ya nos habló, entre otros, el profesor Manuel Lucena del Consejo superior de investigaciones científicas (CSIC) en su “la trama global de los viajes y las expediciones Españolas en época moderna“. Notable y suficiente literatura y trabajos históricos sobre el asunto, ninguna arqueología de época moderna y poca materialidad y museo sobre la maritimidad y su papel en la edad de oro. Menos mal que tenemos esa joya del Museo Naval de Madrid. Sobre la mítica batalla, aparecen medallas conmemorativas, una legendaria bandera abandonada entre la oscuridad y esquinas de remotas capillas europeas que se asoma tras siglos de espera…

En cientos de rincones de lejanas iglesias, remotos conventos, en dispersos museos y en pequeñas colecciones, que van desde el conocido monasterio de San Lorenzo de El Escorial a la Real Armería de Madrid, pasando por las catedrales de Toledo y Santiago. Recónditos monasterios como el de Santa María de las Huelgas, el de Monserrat o Montesión. En el Museo del ejército o en el querido y omphalos marítima del país, nuestro querido Museo naval de Madrid. En pequeñas iglesias como la de Medina del Campo. En museos y palacios de Venecia, impresionante ciudad artística, que maravilla la pintura de Vicentino en la sala del colegio del palacio ducal. Para no olvidar. Para mi una de las más impresionantes (junto con el cuadro del Museo naval de Madrid), sobre Lepanto. En la comuna de Forno di Zoldo, en la iglesia de Santo Stefano de Pisa, en la iglesia de Santa ágata de Spelona, en el castillo de Rivalta, en la iglesia de San Domenico de Turín, en Génova, por supuesto en la Santa sede e incluso en la lejana Viterbo….La batalla de Lepanto nos la encontramos atomizada por todos lados. A modo de solitarios símbolos han sido guardados para la historia de una manera paradójica, ya que curiosamente no han sido objetos de un museo, de un lugar de reencuentro y de memoria (importantes batallas como


www.waterlooregionmuseum.ca/en/index.aspx
o el DIA D, lo tienen y no fueron menos importante que esta, es más fueron otros goznes importantes de la historia, como la propia Lepanto). No existe una huella que nos recuerde tal día como hoy de manera claridad. La claridad en la que toda Europa fue una, liderada por un capitán Español. Desgraciadamente encontraremos pocos legados en la historia que reflejen este hecho.

Figuras en soledad, muchas veces descontextualizadas de un mensaje, de una historia. La de la más grande batalla que conoció la Cristiandad. Vayamos a recordar donde y que ocurre con los verdaderos protagonistas de los naufragios de Lepanto. Hoy en su aniversario, vamos a ver si encontramos sus restos.

De Arqueología submarina sobre Lepanto. Nada de nada.

Si hablamos de una batalla naval y de las naves que naufragaron en la contienda, a todos nos viene rápidamente a la mente la cuestión arqueológica. Es normal. La arqueología representa la vanguardia de la historia y para la cuestión marítima, para sus hegemonías y sus redes de intercambio, que mejor que explicarla mediante pecios y los hitos del legado subacuático, con muchos e importantes los resultados y el significado que deja siempre una campaña arqueológica. Aunque parezca mentira aún no se ha excavado íntegramente ningún galeón de época moderna, por lo que no podemos esperar a que encontremos desgraciadamente ninguna campaña de investigación sobre las galeras de Lepanto, de esos barcos que preservaron con su victoria, los valores del Occidente de por aquel entonces, las raíces de nuestra actualidad. Sin embargo si encontramos y recientemente, a los científicos del INA, (

nauticalarch.org
) excavando, con el arqueólogo español Casabán integrado en el equipo, a un barco cargado de adornos suntuarios y lujosos espejos y cristales, además de pigmentos, para el palacio del sultán otomano Murad III. El «

www.abc.es
». Una nave grande, de remos, fletada por una rica familia de Dubrovnik y que partió de la costa Dálmata en 1583 con el fin de satisfacer la demanda del mercado. Una tormenta desatada nada más partir lo hundió, con su rico cargamento, junto a Gnalic, en un pequeño islote apenas a 3 millas de la ciudad croata de Biograd. Pero todo esto será diez años después de Lepanto. Afortunadamente es de los pocos registros que tenemos sobre los pecios de la época, por lo que queda mucho por investigar en la materia. Intentemos hacer de un problema, una oportunidad. ¿Nos podríamos imaginar lo que significaría estudiar la batalla de Lepanto en profundidad desde la arqueología?. Olvidada para la cultura, sin embargo si ha sido sopesada como un objetivo por los “desastrosos” cazatesoros. Lo de siempre. Además de estos, Throckmorton, ya se interesaba sobre la zona. Normal, es una de las grandes batallas navales de la humanidad. Y no sólo se interesó, sobre la zona realizaron campañas de prospección submarina que en su momento supusieron cierta relevancia, fue la primera vez en Grecia que se utilizó la tecnología de los sistemas de sónar. Las cinco expediciones que tuvieron lugar entre 1971 y 1972 tenían el objetivo de localizar naufragios, sobre todo naves del siglo XVI. Buscaban a Lepanto. Y eso fue hace más de cuarenta años.

De esa forma rastrearon la zona entre Mesolongi y la isla de Oxeia. Para la filmación de un documental sobre la batalla de Lepanto (1571), el canal alemán Spiegel TV si se interesó más recientemente. Aunque parezca mentira, los germanos si se asoman con interés a aquella ventana de la historia. No existe una sola nave musealizada de la época, ninguna nave que nos hable de las maravillas de la arquitectura naval de la época, de su tecnología de sus formas de hacer las cosas. Si acaso, para conocer algunas de los rastros de aquella cultura marítima tendremos que acercarnos al “Dieniz Musezi” de Estambul. Un museo marítimo recientemente renovado, en el que podemos encontrar algunos rastros de aquella legendaria cultura marítima Otomana. No podemos olvidar que en aquella batalla se entremezclan las naves y los naufragios de las naves occidentales junto a la de aquel gran …
Pacocatolic
Ana Luisa M.R
Dios, que en su justicia había permitido que parte de las naciones cristianas cayeran bajo la opresión turca, impuso aquel día un límite y no permitió que el cristianismo desapareciera.
Ana Luisa M.R
Los testimonios de los prisioneros capturados en la batalla. Ellos testificaron con una convicción incuestionable de que habían visto a Jesucristo, San Pedro, San Pablo y a una gran multitud de ángeles, espadas en manos, luchando contra Selim y los turcos, cegándolos con humo.
Pacocatolic
Cuándo la Europa cristiana se unió para combatir al islam, fue la victoria del siglo. Inmediatamente se desunieron y se pelearon entre sí, y todo lo que se ganó en Lepanto se perdió enseguida.
Ana Luisa M.R
Todo cristiano debe conocerla---
Ana Luisa M.R
En 1571 la cristiandad era amenazada por los turcos (musulmanes) Los musulmanes ya habían arrasado con la cristiandad en el norte de Africa, en el medio oriente y otras regiones. España y Portugal se había librado después 8 siglos de lucha. La amenaza se cernía una vez mas sobre toda Europa. Los turcos se preparaban para dominarla y acabar con el Cristianismo.
vgg
Vg2: Ninguna batalla o guerra es gloriosa porque trae en consecuencia la pérdida de vidas-
Ana Luisa M.R
Hoy los cristianos estamos en situación similar, en una lucha entre la cultura de la vida y la cultura de la muerte. Esta se refleja en la destrucción de las familias y también en la crisis de los gobiernos en todos los países. El enemigo parece muy superior en sus fuerzas: Ellos tienen la prensa, la TV, las universidades, el dinero.... La mayoría de los cristianos están dormidos, arrastrados …Más
Hoy los cristianos estamos en situación similar, en una lucha entre la cultura de la vida y la cultura de la muerte. Esta se refleja en la destrucción de las familias y también en la crisis de los gobiernos en todos los países. El enemigo parece muy superior en sus fuerzas: Ellos tienen la prensa, la TV, las universidades, el dinero.... La mayoría de los cristianos están dormidos, arrastrados por el paganismo imperante. Pero no podemos lamentarnos de no tener los recursos que tiene el enemigo. Tampoco podemos esperar a que todos los católicos despierten del letargo en que el mundo los tiene envueltos. Nosotros tenemos las armas mas poderosas: La fe y el Santo Rosario. El Señor ganará la batalla con la entrega total de unos pocos humildes y totalmente fieles al Señor, a María y a la Iglesia. Hombres y mujeres que no se avergüenzan de ser católicos y de luchar con todo el corazón.
Ana Luisa M.R
Uno de los tres admirantes comandando las fuerzas católicas en Lepanto era Andrea Doria. Él llevaba consigo una pequeña réplica de la Virgen de Guadalupe (Patrona de México). Está imagen se encuentra en la iglesia de San Estéfano en Aveto, Italia.--- la mayor razón de reconocer el milagro de la victoria naval es por los testimonios de los prisioneros capturados en la batalla. Ellos testificaron …Más
Uno de los tres admirantes comandando las fuerzas católicas en Lepanto era Andrea Doria. Él llevaba consigo una pequeña réplica de la Virgen de Guadalupe (Patrona de México). Está imagen se encuentra en la iglesia de San Estéfano en Aveto, Italia.--- la mayor razón de reconocer el milagro de la victoria naval es por los testimonios de los prisioneros capturados en la batalla. Ellos testificaron con una convicción incuestionable de que habían visto a Jesucristo, San Pedro, San Pablo y a una gran multitud de ángeles, espadas en manos, luchando contra Selim y los turcos, cegándolos con humo.