En la oficina del padre Christoph Simonsen, rector de la iglesia de la ciudad en Mönchengladbach (Alemania), hay una “cruz” en la que el cuerpo de Cristo ha sido reemplazado por el cadáver de un animal.
Esta parodia es visible desde la iglesia de la ciudad a través de una puerta de vidrio. El animal muerto tiene miembros, pero no cabeza. El obispo de Aachen, monseñor Helmut Dieser, está de acuerdo con esto.
Según publica el 8 de noviembre el sitio web Kath.net, varios sacerdotes y Dieser mismo, a quien le gustan las liturgias taberneras, fueron abordados por este tema.
Un empleado aparentemente perturbado respondió, en la oficina del vicario general, que el arte podría servir también como una “alteración de las percepciones fijas” y que la representación indigna “no era indigna”.
La carta explicó pomposamente que Dieser había llamado a una denominada Comisión para el Arte Eclesiástico para “comprender” cómo el arte podría servir como “intervención en las percepciones habituales en el …Más