Francisco está "mal de salud, apenas puede hablar o andar"

"El Papa está delicado de salud, apenas puede hablar o andar, e irradia tristeza. Estuve encantado de residir en su casa durante cuatro días, pero no creo que siga allí mucho más tiempo". El juez …Más
"El Papa está delicado de salud, apenas puede hablar o andar, e irradia tristeza. Estuve encantado de residir en su casa durante cuatro días, pero no creo que siga allí mucho más tiempo".
El juez Andrew Napolitano, de 73 años, conocido comentarista político en EE.UU., escribió esto en NewsMax.com (15 de marzo) tras una reunión de cuatro días de la Academia Pontificia de Ciencias Sociales en la que Francisco participó a través de Zoom. Napolitano vivía en la Domus Sanctae Marthae, la residencia de Francisco.
Una tarde, Francisco apareció en el refectorio con un andador y un asistente en cada brazo. "Era extraño que se sentara de espaldas a nosotros", escribe Napolitano: "Quise acercarme a él y saludarle, pero un miembro de la Guardia Suiza nos había advertido que no nos acercáramos ni le llamáramos".
Dos días después, Napolitano se acercó a menos de tres metros de Francisco: "Me incliné suavemente y le susurré 'Su Santidad'. Me miró y siguió adelante".
Napolitano es un crítico del Concilio …Más
DEFENSA DE LA FE
Ni la minima intencion de arrepentimiento
kaoshispano1
YA VA PRONTO de vuelta a los infernos... eso es lo que le da pena del ego Mundi.
José Luis (OFS)
En algunas de las fotos que en otros sitios se han publicado, se ve que Jorge Mario Bergoglio va arrastrando sentimientos de culpas, por eso suele verse ahora triste, antes se le veía reír a carcajadas, ahora no, pues su tiempo está próximo a dejar esta vida presente, ¡ojo, que no haya malos entendidos!, pues su oportunidad de la conversión del corazón ha echado a perder su vida, su salvación …Más
En algunas de las fotos que en otros sitios se han publicado, se ve que Jorge Mario Bergoglio va arrastrando sentimientos de culpas, por eso suele verse ahora triste, antes se le veía reír a carcajadas, ahora no, pues su tiempo está próximo a dejar esta vida presente, ¡ojo, que no haya malos entendidos!, pues su oportunidad de la conversión del corazón ha echado a perder su vida, su salvación. Sabrá entonces, esta persona, lo terrible que es el Juicio de Dios para los que mueren en pecado mortal. No soy yo quien le acusa, por los frutos del árbol como la higuera ya se pronuncia por sí mismo, el árbol seco, sin ningún fruto, como aquella higuera, que después de tantos años, no llegó a dar ningún fruto.