Acto de venganza: el inmaduro Francisco se enfada con los canónigos y lo muestra en público
Cuando los canónigos de San Pedro fueron a participar en la oración, se les dijo: “Está prohibido entrar en la basílica de San Pedro. Hoy los canónigos de la basílica no pueden entrar. Órdenes superiores”. La expresión “Órdenes superiores” significa Francisco.
El Capítulo de los Canónigos, establecido en 1053, está compuesto por el arcipreste, el vicario capitular y 34 canónigos, y los sacerdotes coadjutores. Todos los nombramientos son hechos por el Papa. Los canónigos rezan todos los días el Oficio y presiden la Eucaristía Capitular en la Basílica.
Nunca un Papa emitió directivas de este tipo, ya que es tarea de los canónigos asistir a las funciones papales. Franca Giansoldati, una de las periodistas cortesanas de Francisco, escribe que el Capítulo de San Pedro está en el punto de mira de Francisco.
Ella sabe que Francisco -que no tiene problemas con que la gente se disfrace de indios amazonas y se pasee por la basílica de San Pedro- comentó, hace unos años, cuando vio a dos canónigos sirviendo detrás de los cardenales con sus habituales túnicas fucsias durante una liturgia: “¿Quiénes son esos dos sacerdotes vestidos en tecnicolor?”. El estilo y el color de su hábito fueron establecidos por Nicolás III en 1279.
La explicación de Giansoldati es una maniobra de distracción. La razón de la ira de Francisco es que los miembros del Capítulo deben haber protestado, después de que Francisco prohibiera celebrar Misas en San Pedro. El tirano Francisco no soporta las contradicciones.
Es probable que se produzcan nuevos actos de venganza contra el Capítulo. Uno de los canónigos de San Pedro es el cardenal de los Dubia Walter Brandmüller, de 92 años.
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